La Orquesta de Cámara Higinio Ruvalcaba está más que lista para ofrecer una velada especial el próximo 16 de julio, teniendo a la Sala 2 del Conjunto Santander de Artes Escénicas como punto de encuentro para poner en marcha su el quinto programa de su temporada, bajo la dirección de Rodrigo Sierra Moncayo, quien en entrevista con EL INFORMADOR, aborda los temas que escucharemos en este recinto.Nutriendo al programa con obras de Henry Purcell, Krzysztof Penderecki y Felix Mendelssohn, Rodrigo Sierra Moncayo, señala que este encuentro también estará marcado por la pieza “Amatzinac”, del reconocido compositor y director orquestal tapatío José Pablo Moncayo, como parte de los festejos por el 110 aniversario de su natalicio, por lo que visualiza un festín sonoro emotivo y singular.“Muy atinadamente, el maestro Sergio Ramírez —director titular de la (OHIR)— propuso la ‘Chacona’ y la sinfonía de Mendelssohn, quizá por ser compositores pilares dentro de lo que consideramos a Academia, pero al tener también a la mano música de un compositor que nos es más cercano en tiempo, Krzysztof Penderecki, con una obra que podía montarse en relativamente poco tiempo, también resultaba muy interesante para el público, para que pudiera servir de entrada a conocer a este inmenso director”, destacó Rodrigo Sierra Moncayo al referir que integrar una pieza diferente de José Pablo Moncayo es con la finalidad de seguir posicionando más obras de su repertorio más allá de su mundialmente conocido “Huapango”.Respecto a la diversidad de emociones que el quinto programa de temporada propuesto por la Orquesta Higinio Ruvalcaba, Rodrigo Sierra Moncayo invita al público a estar atentos a los multifacéticos ritmos y conceptos que evidenciarán en cada obra.“Creo que las primeras dos obras, ‘Chacona en Sol menor, Z. 730’ y ‘Tres piezas en estilo barroco’, de Henry Purcell y Kristof Penderecki, respectivamente, nos van a invitar a la danza, porque ambas son danzas barrocas muy bellas, la estética de esas obras es para contemplarla. La obra de José Pablo Moncayo —‘Amatzinac’— es reflexiva y contemplativa, porque Moncayo era una persona muy dada al montañismo y senderismo, podemos ver la tierra a través de sus ojos. En la ‘Sinfonía para cuerdas núm. 8 en Re mayor’, de Felix Mendelssohn, tiene momentos diversos, en cuatro movimientos con momentos muy alegres, enérgicos, pero también un adagio muy bello y reflexivo, pasaremos por diferentes estados de emoción”. Los festejos de la familia Moncayo no solo son por las celebraciones que recuerdan el natalicio de José Pablo Moncayo (29 de junio de 1912-16 de junio 1958), pues también se festeja cómo su legado se ha expandido a nuevas generaciones: “las generaciones que vienen detrás de las nuestras están descubriendo este inmenso mundo de sonoridades que nos dejó el maestro Moncayo, por supuesto que ‘Huapango es una obra bellísima y prácticamente perfecta, pero la obra de Moncayo es mucho más basta y rica, a través de estas actividades es que también los nuevos músicos pueden tomar la nueva estafeta”, señala Rodrigo Sierra Moncayo.A esta felicidad también se suman a los proyectos que Rodrigo alista en próximas semanas para seguir diversificando el legado y talento de la familia Moncayo, pues además de tener en puerta diversas presentaciones por Italia y continuar con su dirección y eventos programados también para la Orquesta Sinfónica Juvenil de Zapopan de cara a su 21 aniversario, también alista su debut, el 5 de agosto, en la ciudad Philippsburg, en Baden (Alemania), donde estrenará dos obras del Matthias Hutter, compositor residente. Concierto de la Orquesta de Cámara Higinio Ruvalcaba, con dirección de Rodrigo Sierra Moncayo, en la Sala 2 del Conjunto Santander de Artes Escénicas, el sábado 16 de julio, a las 19:30 horas.
