El fin de año se asoma en el horizonte y coincide con el aumento del apetito por emprender el viaje para despedir 2024. Es el instante para aventurarnos a un destino que nos permita romper la monotonía y llenar el corazón con nuevos paisajes, amaneceres apacibles y memorias que se conviertan en tesoros.Para quienes buscan playa sin que implique aglomeraciones masivas, pero ofrezca un hospedaje cómodo, la sugerencia en esta ocasión nos lleva a uno de los puntos más bohemios y encantadores de Guerrero: Ixtapa Zihuatanejo.El nombre de Ixtapa Zihuatanejo ya nos remite a uno de los espacios más bellos del Pacífico mexicano, gracias a sus múltiples playas, fabulosa oferta gastronómica y brindar opciones para quienes viajan en pareja, familia, grupo de amigos o buscan desconectarse del estrés. Todo en Ixtapa Zihuatanejo tiene una historia por descubrir. Si eres atento, notarás que el nombre de cada playa, restaurante, andador y calle se hunde entre la leyenda y los hechos históricos.Pedro Castelán, director de la OCV de Ixtapa Zihuatanejo, presume para los lectores de EL INFORMADOR sobre las novedades que ofrece este pedazo de cielo. “Somos orgullosos integrantes del programa de Pueblos Mágicos y uno de los destinos de playa más bonitos del país, además de que constantemente estamos tratando de embellecer y darle razones a la gente para visitarnos”.Por ejemplo, un nuevo infaltable es el andador del Capricho del rey, que se ubica entre Playa la Ropa y Playa las Gatas. Castelán explica que el nombre del andador se debe a que según la leyenda prehispánica, aquí vacacionaba el rey purépecha Caltzontzin en compañía de sus doncellas, y era tanta la belleza de Playa las Gatas que ordenó construir un rompeolas, lo que la convirtió en una piscina a cielo abierto, “muy recomendable para la gente que llega con niños o no gusta del mar abierto por temor a que esté picado”.Castelán aprovecha para revelar otra historia: La playa se llama “las Gatas” porque antaño en sus aguas solía encontrarse una gran comunidad de tiburón gato. Hoy, es un espacio muy buscado para quien gusta del oleaje suave y busca tostarse suavemente bajo el Sol guerrerense. Desde Capricho del rey caminamos un poco para llegar a otra residencia que en su momento también fue un capricho… pero político.Apodada el Partenón, porque imita la arquitectura de la afamada construcción ateniense, esta mansión fue propiedad del tristemente célebre Arturo “El Negro” Durazo, siniestro político de los años setenta que uso una fortuna de origen dudoso para levantar esta casa de playa, que fue suya hasta 1984, cuando fue detenido.Desde entonces, el Partenón permaneció como un fantasma silencioso en el corazón de Zihuatanejo sin que se supiera qué hacer con la propiedad, hasta que fue convertida recientemente en Centro Cultural y de espectáculos tras una profunda remodelación.Cuenta con un ágora donde se ofrecerán conciertos al aire libre, así como exposiciones culturales, talleres y otros eventos, además de poder disfrutar su espectacular decoración, inspirada en los palacios helénicos de la antigüedad, con estatuas y frescos que plasman escenas mitológicas.La transformación del Partenón es tanto un ejemplo de redención y de cómo Ixtapa Zihuatanejo logra reinventarse constantemente. Playa y cultura forman parte de los encantos de Ixtapa Zihuatanejo, pero sería imposible no agregar otra de sus grandes (y sabrosas) virtudes: La gastronomía.Nada más suculento que disfrutar de las cenadurías y restaurantes de comida tradicional para vivir la experiencia completa en este destino. Naturalmente no te puedes ir sin probar del mítico pozole guerrerense, que se puede saborear cualquier día, pero el jueves será un infaltable en todo lugar de buen comer.Para calmar la sed, no olvides probar un rico mezcal de la región, pues Guerrero es uno de los grandes productores de este destilado.Termina el día con una caballito de mezcal, mientras observas el Sol hundirse entre las olas del Océano Pacífico. Será el momento en que te sentirás en paraíso. La mejor forma de viajar a Ixtapa Zihuatanejo es un es vía aérea. La ruta más usual es con una escala en la Ciudad de México.Como recomendación de hospedaje, por comodidad y precio, un clásico es el Hotel Brisas Ixtapa (está en Playa Vista Hermosa). Cuenta con cuatro albercas, cancha de tenis, más de 400 habitaciones y si eres fan del golf, dos campos. Descubre más y reserva en www.lasbrisashotels.com.mx/es/ixtapa. CT