La vida se mide en carnavales

GUADALAJARA, JALISCO (06/ENE/2013).- Los primeros carros y bicicletas comenzaron a andar entre las multitudes un martes 22 de febrero de 1898. En el siglo XIX se experimentó el inicio de una fiesta que dejaba de ser organizada por la gente del pueblo y comenzaba a responder a un comité civil. Entre máscaras con las que se confunden las identidades, los sexos y hasta la tristeza se disfraza de alegría, cinco días antes del Miércoles de Ceniza se celebra el carnaval de Mazatlán, una festividad que, a pesar de tener más de un siglo, se mantiene muy vigente.

En La Perla del Pacífico se realiza cada año uno de los carnavales más importantes del país. Con la tambora de la banda la marea de agua salada se convierte en una enorme ola de festejos para bailar de Sol a Sol. Es, sin duda, una fiesta que ha marcado la historia de un pueblo.

El carnaval se celebra prácticamente desde la llegada de los primeros pobladores a ese territorio. Ahora la celebración sigue y se ha convertido en un atractivo cultural que convoca a gente de todas partes del mundo para experimentar el goce del puerto.

Este 2013 la celebación se llevará a cabo del 7 al 12 de febrero, con el tema La Linterna Mágica. El paseo costero ha comenzado a vestirse con guirnaldas.

Según el titular del Instituto Municipal de Cultura de Mazatlán, Raúl Rico González, la inversión total para el festín será superior a los 20 millones de pesos. Las selecciones del Rey de la Alegría y de las reinas de los Arreglos Florales, Infantil y del Carnaval estarán acompañadas con presentaciones en vivo de agrupaciones famosas como la Original Banda El Limón.

A pasear por el Centro Histórico

Entre sus calles, callejones, edificios y quioscos se cuenta la historia de un puerto que, junto con San Francisco en California y Valparaíso en Chile, fueron los más importantes en la costa del Pacífico en el siglo XIX.

Gracias a las actividades mineras cerca del puerto, Mazatlán se convirtió en el ingreso del comercio internacional, sobre todo de Europa y Oriente. Fortunas se fueron generando y esto permitió grandes impulsos en la infraestructura de la ciudad. Hermosas casas neoclásicas y barrocas dan prueba de ello y del poder económico que se vivió en aquellos años de los 1800.

Uno de los recintos más bellos del puerto es el Teatro Ángela Peralta, oficialmente inaugurado en febrero de 1881 bajo el nombre de Teatro Rubio, por ser éste el apellido de su propietario. Con el paso del tiempo sus funciones fueron cambiando; de casa de ópera y teatro a cine, vaudeville, recinto de fiestas carnavalescas e incluso arena de box.

En 1987 para rehabilitar el inmueble, luego de que quedara en ruinas tras 20 años en desuso. Así, adoptó el nombre de Teatro Ángela Peralta, como se llamaba cuando operaba como cine. Con su fachada neoclásica, vasta en ornamentación, ahora es sede de diversos festivales.

Tocado por Midas

En la avenida Gaviotas se localiza la zona dorada. Su nombre no viene del azar: las mejores joyerías, especializadas en diamantes y piedras preciosas, hoteles de lujo, centros de diversión exclusivos y las excelentes cocinas que allí se pueden encontrar la vuelven un punto clave en la visita del turista. Se trata del área más cosmopolita de Mazatlán.

Aquí también hay un sinfín de plazuelas, entre ellas la República. Se dice que es la principal por encontrarse en el corazón del Centro Histórico, entre la Catedral, el Palacio Municipal y los edificios de Correos. En su quiosco se encuentra un restaurante en el que todos los domingos se celebra La hora municipal, donde diversos artistas interpretan música para el placer de los comensales.

Otra es la Plazuela Machado, construida en 1832. Allí se realiza anualmente una muestra gastronómica en fechas de carnaval. Los mejores restaurantes de la región hacen gala de sus mejores platillos.

Por su parte, la Plaza Zaragoza se irguió en 1954 como homenaje al general Ignacio Zaragoza, quien en la Batalla de Puebla hizo frente al ejército intervencionista francés. Aquí todos los aficionados de ajedrez acuden para participar en torneos que se realizan en el restaurante instalado en su kiosco.

Muchas otras plazuelas adornan a Mazatlán, como la Rodolfo Sánchez Taboada, la plazuela Benito Juárez, General Ángel Flores o la plazuela Colonia Francisco Villa.

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Cómo llegar

Aeroméxico ofrece vuelos directos desde dos mil 826 pesos.

Primera Plus cuenta con una corrida directa al precio de 440 pesos.