Jalisco ha sido uno de los estados más importantes en la industria textil a nivel nacional. Las telas, indumentarias y similares que se fabrican en la entidad son ejemplo de ello; sin embargo, actualmente, este sector atraviesa momentos de cambio provocados por la competencia global y particularmente por la importación de textiles de países asiáticos.En la entidad destacaron empresas enfocadas en la fabricación de pantimedias, calcetines, toallas, camisetas y tejidos especiales; entre ellas, Industrias Textiles Jubar, Textil Alma, Pantimedias Rimo, Ragol, Compañía Bonetera La India (Cibolain), Grupo Interpunto México (que fabricaba las tobilleras Periquita), Bonetera San José, Bonetera Jalisciense, Famax, Boneteros Unidos, Calcetines Camelot, Industrias Dobletes, Corporación Burlington, Hilados Guadalajara, entre otras más; cabe señalar que la mayoría de estas compañías con el tiempo dejaron de fabricar o se convirtieron en comercializadoras. “Estas empresas no pudieron con el embate que se vino de las importaciones asiáticas”, señaló Mario Gutiérrez Treviño, presidente de Calcesport. Otras empresas que desaparecieron fueron: Hilasal, la única del sector textil que cotizaba en la Bolsa Mexicana de Valores y Celanese Mexicana, en Ocotlán, que fabricaba hilatura de poliéster y nylon que le daban fortaleza a esta industria. Por su parte, la empresa Jomar, en San Miguel El Alto, también dejó de fabricar y se convirtió en comercializadora.Gutiérrez Treviño explicó que la situación de varias de las empresas antes mencionadas se dio gracias a que México, como país, no fue competitivo ya que algunos insumos, como la energía eléctrica, son más caros aquí que en otros países.Aunado a lo anterior, la industria textil de Jalisco también se ha visto afectada por tres factores en los últimos años: contrabando, subvaluación y abuso de programas de importaciones.Jorge Corvera Nepote, presidente de la Cámara Textil de Occidente, explicó que la excesiva importación irregular sumada al contrabando técnico es lo más grave para el sector, pero se están recuperando. Reconoció que han trabajado con la Secretaría de Economía para revisar las fracciones arancelarias, pero todavía falta mucho por hacer. “Lo que buscamos es que las importaciones temporales subvaluadas se consideren fraude aduanero”.Sector textil a detalleFuente: Cámara Nacional de la Industria Textil.
