El teatro siempre como una válvula de escape, como un fiel reflejo de la sociedad, como una oportunidad de reír ante lo absurdo que puede ser la vida. Para Bruno Bichir, el teatro siempre será ese regalo para confrontarse con uno mismo y su entorno.Es por ello que a su regreso al Festival WIT el próximo 12 de mayo en Guadalajara, el actor decidió reencontrarse con los tapatíos a través de “La historia del tigre”, un monólogo creado por el Premio Nobel de Literatura, Darío Fo, en el que el humor y la reflexión son pilares de esta trama que tiene a un soldado y a un cachorro felino como protagonistas.En entrevista, Bichir detalla: “Este monólogo de Darío Fo es bellísimo, es una historia divertida. Es un proyecto muy amoroso y entrañable para mí. El público siempre tiene una reacción muy poderosa y eso se debe a Darío Fo”.El histrión mexicano expresa la relación especial que tiene con esta obra que comenzó a presentar desde el año 2002 con la dirección de su padre, el también actor Alejandro Bichir, además de emocionarse por experimentar nuevamente un formato íntimo y cercano, en el que prácticamente el espectador está frente a él sin escenarios ni tarimas de por medio.“Me parece fantástico todo lo que está sucediendo en el Festival WIT, mientras más seamos constantes y directos con las artes y sus disciplinas, mejores personas seríamos todos, tendríamos un mundo mejor, más sensible, lleno de reflexión a través de emociones trascendentes. El festival te catapulta para ver otros proyectos, a creadores. El año pasado también presenté teatro, pero el espacio al que ahora nos enfrentamos en el lobby al atardecer, le dimos la vuelta para que la magia del teatro suceda, se viera con otras dimensiones, con mayor complicidad con el espectador”.Aunque retomar textos y proyectos en diversos momentos de la vida siempre brindará la oportunidad de encontrar más significados, para Bruno Bichir la perspectiva que tiene sobre “La historia del tigre” no ha sufrido mayores cambios más que la diversidad de lugares en donde la ha presentado desde su primera función en Tijuana hace 17 años , pues el humor y reflexión que el dramaturgo italiano impregnó en su texto tiene la gracia de ser totalmente atemporal ante cualquier circunstancia y público.“En este texto no es que haya encontrado diferentes lecturas, simplemente lo he gozado más, ese sería el cambio fundamental, sólo lo he disfrutado de manera más trascendente y profunda. Hay textos que vuelves a leer y tu perspectiva va cambiando, pero con este trabajo de Darío Fo no cambian sus intenciones ni el contenido ni el contexto en el que lo he interpretado en todos estos años”.Bichir puntualiza que si bien el legado del Nobel destaca por tramas y personajes complejos, sus historias resultan totalmente sencillas y con mensajes muy concretos como en el caso de “La historia del tigre”, que parte de un soldado que, en sus intentos por salvar su vida en plena batalla, logra refugiarse en una cueva en donde conoce a una tigresa y a su cachorro con el que establece una peculiar relación.“Empieza una relación como de pareja, es una historia que pareciera absurda y disparatada. Ahí se desata una serie de valores del alma cuando sale la amistad, la dignidad y la justicia. Al final de cuentas la frase de ‘Pueblo unido jamás será vencido’ ofrece una dimensión muy aterrizada y trascendente. Darío Fo hace este tipo de indagaciones con temas que después pareciera que a muchos nos pasa en nuestra cotidianidad. La comedita cataliza todo lo ético, heroico, lo inalcanzable”.Ante la potencia que la historia tiene por sí sola, la propuesta escénica que ha desarrollado no requiere de más escenografía que la de él mismo frente a los espectadores.“La intimidad que el espectador tiene cuando va al teatro es inusitado, en este caso es mayúsculo porque estaremos provocando en un lobby, no necesito más que tres metros cuadrados para trabajar, estaré rodeado, los espectadores están muy cerquita, prácticamente estaremos nariz con nariz”.Bruno Bichir presenta “La historia del tigre” (texto de Darío Fo) en el Festival WIT del Hotel Demetria, el próximo domingo 12 de mayo a las 18:00 horas. Boletos: $350 pesos. Lo recaudado será a beneficio de fundaciones de bienestar animal.