En psicología, los hábitos de un individuo, incluso los aspectos más minuciosos, revelan rasgos profundos de su personalidad. En este contexto, un estudio sobre la conexión del cabello y las emociones revela que el significado de recogerse el cabello siempre va más allá de los aspectos prácticos y estéticos.El análisis examinó la relación entre el sistema nervioso central y la piel de los mamíferos, donde se incluyen los humanos con los folículos pilosos del cuero cabelludo.Los resultados demostraron que existe una interacción entre el cabello y las emociones, debido a que el sistema nervioso central influye en el cabello y la piel, y estos participan en procesos neurohormonales constantemente.Necesidad de controlRecogerse el cabello continuamente puede revelar la necesidad de control y orden de una persona, pues este tipo de peinados otorgan la apariencia y la sensación de pulcritud.Demostrar autoridadAmarrarse el cabello expone con mayor claridad el rostro y permite establecer contacto visual de manera más efectiva, por esta razón, sobre todo en situaciones profesionales, tener el cabello recogido denota autoridad y transmite mayor seguridad.Una persona prácticaAmarrarse el pelo es una práctica que permite una mayor concentración y realizar diversas actividades de la vida cotidiana sin que los cabellos obstruyan la visión u otras partes del rostro, por ello, este también es un símbolo de practicidad.Mecanismo para manejar la ansiedadMuchas personas suelen amarrarse el cabello, desamarrarlo y luego volverlo a atar como un mecanismo de autorregulación para combatir el estrés y la ansiedad.Cabe señalar que los estudios sobre la conexión entre el cabello y las emociones todavía son escasos y que las anteriores no son las únicas interpretaciones de llevar el cabello recogido, pues su significado puede ser determinado por el contexto del individuo y su lectura personal.MBMantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp
