Conforme a los datos de estudios publicados por el Pew Research Center, en este año la población latina, en su mayoría de origen mexicano, será la minoría racial más grande en estados Unidos con 32 millones de ciudadanos en capacidad de votar en la elección de noviembre.Representan estadísticamente 13.3% de todos los votantes potenciales. Con esa fuerza podrían desempeñar un papel muy importante en las elecciones primarias, sobretodo del Partido Demócrata que está en marcha.La mayoría de ellos, 56%, vive en los estados que celebrarán primarias y caucus demócratas durante o antes del supermartes del 3 de marzo.Son ahora muchos más en comparación con 29% de lo que fueron en 2016. A nivel nacional, 62% de los votantes latinos registrados se identifica o se inclina por el Partido Demócrata, mientras que 34% dice lo mismo sobre el Partido Republicano. Aunque no hay datos desagregados de los ciudadanos de origen mexicano, se considera que los porcentajes son muy parecidos dado el sesgo estadístico registrado en elecciones anteriores.Los mexicano-americanos viven en todos los estados de la Unión, pero son significativamente importantes en algunas regiones y estados en donde su voz puede comenzar a sonar más fuerte. El Estado de California concentra casi 25% de todo el voto latino de la nación vecina, con 7.9 millones de votantes potenciales de los cuales se considera que casi cinco son mexicanos. Texas tiene un segundo puesto con 5.6 millones, también con mayoría mexicana y Florida con 3.1 millones en donde los mexicanos se encontrarían en un tercer o cuarto sitio. Nueva York tiene dos millones de votantes latinos de los cuales se considera que casi 35% es mexicano y Arizona tiene 1.2 millones, en su mayoría paisanos.Desde el punto de vista de la fuerza política al interior de cada Estado los latinos, y con ellos los mexicanos, son 43% de los votantes de nuevo México, 30% de los de California y Texas, 24% en Arizona y 20% en Florida.En Estados Unidos hay 435 distritos electorales que representan, en promedio, cada uno, a 747 mil personas. En algunos de ellos el peso de los hispanos y mexicanos es muy significativo, como en el número 30 de Texas con sede en Dallas que tiene más de 359 mil latinos, el número más elevado de todos. Otros distritos en Texas como el 16, 34 y 23 ubicados en la frontera con México tienen más de 321 mil votantes latinos.Pero, además, si se observa el peso latino en cada distrito encontramos que el Distrito 40 de California con sede en Los Ángeles tiene 80% de votantes latinos en su mayoría mexicanos. En Texas, el 34 que corresponde a la zona de la frontera, en la costa del Golfo de México tiene 79%, el 16 con sede en El Paso tiene 77%, el 15 en la frontera con Tamaulipas con 73%, y el 28 de San Antonio tiene 71 por ciento. Además, en 26 distritos el voto latino significa al menos la mitad de los votantes registrados. California tiene 11, Texas 8, Florida 3, Arizona 2, Nueva York e Illinois completan la lista con 1 cada uno. Sin embrago, hay que señalar que de los más de 60 millones de latinos y 35 millones de mexicanos que, se estima, viven en Estados Unidos sólo son electores la mitad. Lo que representa la menor proporción de representación política de cualquier minoría étnica. Esto debido a la población sin estatus legal y al temor o desinterés que tradicionalmente ha rodeado a las comunidades.Es importante considerar que dado que la mayor parte de los latinos y mexicanos es joven, en esta ocasión hay una gran cantidad de personas que podrían votar por vez primera.Considerando estos datos los candidatos se encaminan a desarrollar una campaña para atraer el voto de los latinos con estrategias muy distintas. Llama la atención que el voto latino republicano, aunque es minoría, se ha fortalecido en la actual administración e incluso hay un segmento minoritario que apoya a Trump a pesar de su actitud antimexicana.Se considera que hay más de 15 millones de familias en México que tienen parientes emigrados en Estados Unidos y, por ende, los temas de la política electoral serán cada vez cercanos para nosotros, además del interés político que significa el proceso de integración económica y coordinación geopolítica que vivimos. La elección de noviembre será la que tenga más votos mexicanos en la historia de Estados Unidos.
