Cada mañana recibo la síntesis de noticias. Por las portadas uniformadas de cuatro “periódicos” sé qué tema le importa al gobierno de Jalisco. Este lunes las cuatro gacetillas tenían el mismo titular: “En este sexenio localizan a 16 mil 427 personas desaparecidas”. Sólo reprodujeron el comunicado del gobierno estatal, enviado el domingo, cuyo laudatorio párrafo final decía: “La localización de personas ha sido una gran diferencia entre el gobierno anterior y el actual gobierno encabezado por Enrique Alfaro, ya que antes el Gobierno del Estado no realizaba acciones de búsqueda”. Sin embargo, en este sexenio también acumulamos 15 mil 021 personas desaparecidas a la fecha (nueve mil han desaparecido en la presente gestión). Ambos datos se consignan en el Registro Estatal de Personas Desaparecidas: 16 mil localizados VS 15 mil desaparecidos. ¿Qué significa? ¿Que el esfuerzo gubernamental rinde frutos? ¿Que si hay muchos desaparecidos también hay muchos localizados? La comunicación oficial quisiera que nos comiéramos este pastel adornado con un betún especial de cifras a conveniencia. Poner el énfasis en las personas “localizadas” es una puerta trasera para evadir el problema. De 16 mil 427 personas localizadas, sólo poco más de 4 mil fueron víctimas de un delito relacionado con desaparición forzada, cometida por particulares o algún otro ilícito (robo, extorsión, trata, etc). Más de la mitad de estas últimas, además, fueron encontradas sin vida. Hay otro universo de más de 12 mil localizados, el 75% restante, que no fue víctima de un delito. Significa que pudo tratarse de una ausencia voluntaria, lo mismo que su regreso. El mérito de la autoridad para localizarlos consiste en “evitar” un delito que nunca se cometió. En pocas palabras, centrar el discurso institucional sólo en hablar de los más de 16 mil “localizados” es tan irrelevante para el problema como si un delincuente, autor de un grave delito, ante el juez pidiera clemencia por los ilícitos que no cometió.La narrativa oficial minimiza así la gravedad de una crisis que en realidad sólo ha aumentado en este sexenio: hay más de 15 mil desaparecidos, y más de la mitad desaparecieron en el gobierno de Enrique Alfaro.
