En días pasados fui testigo del lanzamiento de esta marca que luego de una gran historia de éxitos y grandes esfuerzos se lanzó al mercado con bombo y platillo. Esta historia inicia ya hace muchos años, donde la constante de esta destilería de tequila siempre fue la de elaborar excelentes tequilas sin escatimar recursos tanto en materia prima, mano de obra calificada y gran tecnología, pero sin dejar de lado toda la herencia del bien hacer un gran destilado.En la sangre de los actuales dueños corre toda una tradición tequilera, y es que desde hace tres generaciones, esta empresa ya se dedicaba a la siembra de agave azul, que por cierto la ubicación de esta fábrica y todos sus cultivos de agave están en la parte más alta de Los Altos de Jalisco, a más de dos mil metros sobre el nivel del mar, en el pueblo de Jesús María (a unos cuantos kilómetros de Arandas), zona con mucho viento que disipa cualquier contaminación de levaduras para una debida fermentación, y grandes contrastes de temperatura (mucho frío en la noche y algo de calor en el día) que favorecen y son las mejores condiciones para el cultivo del agave azul (de lo más preciado en la industria).Y bueno, luego de adquirir gran experiencia y en honor de Don Ricardo López nacido en el año de 1940 es que se decide elaborar esta nueva marca, que como él dice “Con gran esfuerzo y calidad en el producto el éxito tarde o temprano llegará”. Don Ricardo gran empresario y benefactor de la zona siempre ha sido una persona visionaria y muy echado para adelante, y no fue sino hasta que a él le satisfizo este tequila que fue lanzado al mercado, se cuidaron todos los detalles desde la selección de agaves maduros, cocidos en hornos de piedra durante 30 horas a vapor a menor presión (cocción muy lenta), 24 horas de reposo y otras 18 horas de enfriamiento; fermentación natural (auxiliada con levadura exclusiva de Casa Campo Azul), y doble destilación en alambique de acero con interior de cobre, además de utilizar agua de pozo profundo perfectamente mineralizada.Ya lo podemos encontrar en el mercado en este momento, las notas del tequila blanco son, en nariz muy complejas, aromas a cítricos, manzana verde, caramelo sin olvidar el agave cocido y en boca gran equilibrio, redondez y gran final.El tequila reposado tenemos notas muy similares ya que se pretende que las notas de tequila blanco se conserven, sin embargo, en nariz encontraremos además algo de vainilla natural y barrica ligera, al gusto un poco de más suavidad y taninos en perfecto equilibrio. Algo que resalta es el balance de aromas y sabores donde puedes estar satisfecho y concluir que 1940 es un gran tequila que compite con cualquier tequila de los llamados artesanales.Muchas Gracias.
