Una colección osteológica (de huesos humanos), que conforman un total de 920 cajas encontrados durante la construcción del Tren Maya, fueron trasladados al Centro de Resguardo de la Dirección de Antropología Física (DAF), en su nueva sede de la Coordinación Nacional de Antropología, en la colonia San Jerónimo Lídice, al sur de la CDMX.Esta colección proviene de diversos contextos de excavación registrados en los siete tramos de la construcción del Tren Maya; una parte importante de la misma requerirá de tareas de limpieza y consolidación, salvo aquellas provenientes de los trayectos 1 (de Palenque, en Chiapas, a Escárcega, en Campeche) y 2 (de Escárcega a Calkiní, en Campeche), "que están perfectamente separados, embalados y listos para estudiarse a profundidad", se informa en la página de la secretaría de Cultura del Gobierno de México."Se trata de la mayor serie esquelética humana, en conjunto, que se integra al área. Para el INAH y para nosotros, en lo particular, es un momento histórico", indica el titular de la DAF, Agustín Axel Baños Nocedal, quien agrega que la llegada de este material inaugura el segundo centro de resguardo de la dirección, pues el primer repositorio, ubicado en el Museo Nacional de Antropología, alberga un aproximado de 11 mil cajas, con siete toneladas de restos humanos.La mayoría de los huesos encontrados en los tramos 1 y 2 corresponden a depósitos individuales, directos, de tipo primario y en posición extendida, así como de tipo indirecto, ya que se hallaron en continentes artificiales, como cistas, chultunes y dentro de vasijas de barro. Muchos presentaron mal estado de conservación y fue prácticamente imposible observar las variables biológicas.En el ensayo, contenido en el No. 176 de la revista Arqueología Mexicana, enuncian que no hay una tendencia particular sobre la correspondencia hacia un sexo u otro de los individuos analizados: “En la etapa adulta, el rango de edad que prevalece en la muestra de estudio es de 21 a 35 años. En relación con los infantes, van desde la primera infancia hasta la adolescencia. En cuanto a la estatura, la talla estimada para los masculinos va de 155 a 166 cm, y en el caso de los femeninos, de 146 a 152 cm”.Se observaron dos tipos de deformaciones en el cráneo, la deformación tabular erecta que produce una cabeza ancha, corta y plana, y la deformación tabular oblicua, formada por prácticas comunes para que los huesos crecieran de forma alargada y aplanada.Sobre las patologías que padecieron, mencionaron dos principales; la osteomielitis, una infección ósea causada por bacterias, micobacterias u hongos, y la periostitis, una lesión que suele aparecer en la parte interna de la tibia, en la zona de la espinilla, común en deportistas, como corredores y bailarines, ambas se asocian a procesos infecciosos y traumatismos.También se les observaron deficiencias alimenticias que provocaron desórdenes de origen metabólico, como la hiperostosis porótica y la criba orbitalia, además de enfermedades vinculadas con la salud dental, aunque el limado dental y el uso de incrustaciones en los dientes están presentes en algunos de los individuos analizados.Según la Secretaría de Cultura, lo anterior solo es la fase inicial de una labor titánica de procesamiento en gabinete, la cual ahora proseguirá en la DAF, anota Baños Nocedal: “Aunque contamos con series esqueléticas completas de distintas regiones del país, esta nos puede dar un panorama más amplio sobre la ocupación poblacional de la península de Yucatán, en diferentes etapas de la época prehispánica”."Es un estudio que arrojará luz sobre una gama de condiciones e incógnitas que existen y persisten dentro de los estudios mayas, por ejemplo, los motivos por los cuáles se desmanteló el entramado que durante siglos sustentó a grandes ciudades, y que llevó a la dispersión de estas poblaciones. Existen hipótesis, pero conocer a los actores, sus condiciones de salud-enfermedad, alimentación e, incluso, si tienen rasgos de sacrificio ritual, nos puede ayudar a entender las relaciones humanas de ese momento, desde una perspectiva más amplia", finaliza el antropólogo físico.Con dicha acción, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se compromete a continuar con el registro, catalogación, conservación e investigación de este corpus, el cual es parte del patrimonio biológico y cultural del país al representar evidencia directa de los grupos que habitaron el sureste y la península de Yucatán antes de la invasión española.* * * Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp * * *EA