En el marco de la conmemoración del Día de la Armada de México, la Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, dio inicio a las obras del Nuevo Puerto Manzanillo-Cuyutlán, un ambicioso proyecto que posicionará a México como un referente mundial en infraestructura portuaria. Con una extensión de mil 880 hectáreas y una inversión de 63mil millones de pesos, se espera que este recinto sea uno de los más grandes del mundo en capacidad operativa. El proyecto, que estará a cargo de la Secretaría de Marina, contempla la construcción de dos terminales de contenedores y muelles de mil 500 metros, diseñados para recibir hasta tres megabuques de manera simultánea. Una vez concluido en 2030, el puerto tendrá capacidad para mover cinco millones de contenedores anuales, un millón más que el actual puerto de Manzanillo. Sheinbaum destacó la participación de las Fuerzas Armadas en la ejecución de obras estratégicas en el país, como el Tren Maya, los aeropuertos y otros puertos clave. “Este puerto será un motor de desarrollo no solo para Colima, sino para toda la nación”, afirmó. El Nuevo Puerto Manzanillo incluirá una central termoeléctrica y seis grúas eléctricas con capacidad para 65 toneladas, un componente clave para reducir su impacto ambiental. Los recursos provendrán de la inversión privada y del Gobierno Federal, buscando garantizar la sostenibilidad económica del proyecto. Indira Vizcaíno, gobernadora de Colima, celebró la importancia de la obra para modernizar la conexión logística de México con el resto del mundo. “Este proyecto es una oportunidad para traducir el desarrollo en bienestar para la mayoría de nuestra población”, afirmó. Por su parte, el secretario de Marina, Raymundo Morales Ángeles, subrayó que el puerto fortalecerá la conectividad con otros importantes recintos portuarios del país, como Lázaro Cárdenas, Veracruz, Progreso, Acapulco y Ensenada. Además, resaltó que este proyecto estará vinculado al Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, lo que incrementará la inversión privada y el desarrollo de los Polos de Bienestar en México. El Nuevo Puerto Manzanillo podría convertirse en el proyecto insignia de la administración de Sheinbaum. Según Israel Macías López, profesor de Economía de la Universidad Panamericana, su impacto económico será determinante para posicionar a México en la élite del comercio marítimo internacional. “Con este proyecto, Manzanillo podrá competir con los principales puertos del mundo, incluso al nivel de Los Ángeles, en Estados Unidos. Es una obra estratégica que marcará el sexenio por su relevancia económica”, señaló el académico. Sin embargo, Macías López enfatizó la necesidad de complementar la infraestructura portuaria con mejoras en las vías de comunicación terrestre. “Para que el puerto funcione a su máxima capacidad, se requiere una modernización integral de las carreteras y autopistas que conectan con él. De lo contrario, se generarán cuellos de botella que limitarían su potencial”, advirtió.Actualmente, el puerto de Manzanillo es el más importante del país, moviendo poco más de cuatro millones de contenedores al año y representando el 67% del Producto Interno Bruto nacional. Con el Nuevo Puerto Manzanillo, México se posicionará como un nodo logístico global, capaz de atender la creciente demanda del comercio internacional y fortalecer la economía nacional.