Ante el posible incremento de deportaciones masivas de migrantes, las autoridades municipales de Tijuana se están preparando para recibir hasta 30 mil connacionales. Esto ocurre en el contexto de políticas más estrictas en Estados Unidos hacia los migrantes, lo que ha encendido las alarmas en la frontera.La estrategia principal incluye la habilitación de una nave industrial como refugio temporal para los deportados. En una primera etapa, se contempla atender a 10 mil personas, pero se prevé una capacidad máxima para 30 mil en caso de ser necesario.“Nos estamos preparando para recibir hasta 30 mil personas, según los primeros anuncios que se hicieron”, explicó Arnulfo León, secretario de Gobierno en el Ayuntamiento de Tijuana.Sin embargo, el acondicionamiento de la nave industrial aún no está terminado. Las autoridades están evaluando medidas de seguridad y cumplimiento de lineamientos de derechos humanos para garantizar que las instalaciones sean adecuadas.José Luis Jiménez, director de Protección Civil de Tijuana, comentó que el diseño inicial presentado para el refugio no cumplía con las normas de seguridad. “La cuestión de la nave está bien, pero el proyecto inicial no cumplía con los estándares de seguridad. Ahora se están haciendo adecuaciones, y pronto se tomará una decisión”, explicó a medios locales.Mientras tanto, las autoridades han descartado el uso de espacios públicos, como unidades deportivas, salvo en casos de emergencia.José Luis Pérez Canchola, director de Atención al Migrante en Tijuana, aseguró que el municipio cuenta con capacidad inmediata para atender a los deportados en caso de un aumento en las repatriaciones. “El albergue federal Carmen Serdán tiene capacidad para mil personas en excelentes condiciones, incluso con cocina del Ejército. Además, los albergues de la ciudad tienen mil 500 lugares disponibles”, detalló. En paralelo a los esfuerzos por habilitar refugios, la situación en Tijuana ha generado tensiones. Activistas promigrantes realizaron una protesta ayer, quemando una piñata con la figura de un Policía municipal, en señal de rechazo a los abusos cometidos contra migrantes.Sergio Tamai, director de Ángeles Sin Fronteras, denunció públicamente que los agentes de seguridad han robado, golpeado y vulnerado a los migrantes, tanto extranjeros como mexicanos desplazados. “Los policías se aprovechan de los débiles, pero no se meten con los narcotraficantes porque están coludidos”, afirmó.Los manifestantes, reunidos frente al edificio municipal, exigieron un alto a las prácticas que han puesto en riesgo la integridad física y social de las personas en tránsito.Agencias CT