Desde hace un par de semanas, empleados, magistrados y jueces del Poder Judicial de la Federación (PJF) están en paro indefinido en protesta contra la iniciativa que el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó en febrero.Esta iniciativa pretende reformar el Poder Judicial y en ella se contempla reducir de 11 a 9 los miembros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y eliminar sus dos salas; establecer un Tribunal de Disciplina Judicial; reemplazar el Consejo de la Judicatura Federal (CJF); implementar la figura de ‘jueces sin rostro’ para proteger a quienes manejen casos de narcotráfico y terrorismo y que jueces, ministros y magistrados sean elegidos por voto popular, similar a gobernantes o legisladores.Actualmente, la propuesta está en discusión con miembros de la Cámara de Diputados y se espera que sea aprobada este martes 3 de septiembre.En vista de ello es que el próximo 4 de septiembre se llevará a cabo un paro nacional en México en apoyo al Poder Judicial de la Federación. La llamada a este paro nacional se ha propagado extensamente en redes sociales, donde se insta a la población a abstenerse de trabajar, asistir a clases, hacer compras o utilizar servicios digitales este miércoles. El propósito es expresar un rechazo firme a la reforma y respaldar la independencia del Poder Judicial.Por su parte, el presidente López Obrador ha censurado estas protestas, acusando a los altos funcionarios del PJF de manipular a sus empleados y a los académicos de influir en los jóvenes. A pesar de esto, la sociedad civil parece dispuesta a adoptar medidas firmes para salvaguardar la independencia del Poder Judicial.Este paro nacional podría convertirse en una de las protestas más significativas en defensa del sistema judicial en la historia reciente de México, y sus efectos se reflejarán en las futuras decisiones legislativas. YC
