La llamada zona de las Four Corners está localizada al Sudoeste de Estados Unidos, y marca el punto de unión de los Estados de Utah, Arizona, Colorado y Nuevo México; y es precisamente en Utah donde se localiza el hotel y resort Amangiri, un oasis de lujo en medio del desierto de 243 hectáreas.El diseño arquitectónico de este paraíso estuvo a cargo de tres arquitectos: Marwan Al-Sayed, Wendell Burnette y Rick Joy, quienes crearon un asentamiento audaz pero receptivo que honra y celebra la magia y el misterio de los majestuosos acantilados y las formaciones rocosas del Sur de Utah.Construido en 2009, este resort está rodeado del Gran Cañón y es el hogar de una gran piscina con vista al Monumento Nacional de Grand Staircase-Escalante, una de las máximas joyas geológicas del mundo. Aunado a ello, el ecosistema de plantas y animales de la zona son el deleite para los amantes de la naturaleza; además, en dicho destino reina una gran herencia arqueológica que incluye huellas y fósiles de dinosaurios de hace más de 160 millones de años.Este espacio, además de ofrecer tratamientos de belleza y bienestar, en invierno organiza paseos a caballo y excursiones al aire libre, viajes en barca por el río Colorado y paseos en globo y helicóptero. También, hay actividades de aventura, como espeleología o escalada, así como rutas para visitar el parque nacional de Zion y sus empinados acantilados.Si nos enfocamos en las instalaciones del hotel, éste cuenta con suites de lujo, una gran biblioteca y una estupenda bodega de vinos; pero sin duda su Desert Lounge, un salón que modula su temperatura e iluminación para disfrutar de las puestas de sol y el paisaje de las estrellas, es un gran atractivo.Amangiri pertenece al grupo de complejos hoteleros de lujo de Amanresorts, fundado en 1988 por el empresario Adrian Zecha.Los empresarios Bill Gates y Mark Zuckerberg, así como el tenista Novak Djokovic son algunos de los clientes que frecuentan este espacio que tiene como objetivo la búsqueda de la armonía entre el medio ambiente, la historia y la cultura.Aunado a hospedarse en el hotel Amangiri, un “must” para conocer en Utah es visitar el Hogle Zoo, donde la gente podrá ver cebras, jirafas, entre otros animales; además hay un acuario hermoso con peces coloridos, focas y nutrias. En este sitio también hay un aviario con loros.Otro atractivo es el parque nacional Arches, el cual tiene la concentración mundial más grande de arcos de piedra naturales. Este espacio es una agrupación de piedras areniscas rojas, desérticas y puntiagudas que forman pináculos y espirales.Finalmente, nadie puede salir de Utah si haber pisado el Parque Nacional Bryce. Este sitio está abierto las 24 horas del día y está ubicado a una altura de ocho mil pies, lo cual facilita que en una noche sin nubes, se puedan apreciar las millones de estrellas que aparecen en el cielo.Al complejo hotelero se puede arribar por avión, aterrizando en el aeropuerto de Page, en Arizona; de ahí se tiene que viajar en coche durante 25 minutos.