Según la Organización Mundial de la Salud, el tratamiento recomendado para atender la trombosis con trombocitopenia, podría ser similar al de la trombocitopenia inducida por heparina (TIH), es decir: gammaglobulina intravenosa y anticoagulantes no derivados de la heparina.La detección precoz y la prevención son fundamentales para disminuir las secuelas que puede producir a medio y largo plazo la enfermedad tromboembólica venosa.Según la Clínica Universidad de Navarra, las principales medidas preventivas son, en primer lugar, medidas físicas y, en segundo farmacológicas.Entre las primeras serán beneficiosas todas las medidas que favorezcan el retorno venoso, como elevar los pies de la cama, movilización precoz, así como los distintos modelos de vendajes, compresión neumática y medias elásticas; todo ello para aumentar el flujo de las venas profundas de las piernas.Las medidas farmacológicas están indicadas principalmente en pacientes con riesgo elevado. Se han empleado numerosas sustancias como aspirina, heparina y otros anticoagulantes, pero en la actualidad el método de elección es la administración por vía subcutánea de un preparado de heparina de bajo peso molecular, ya que se ha demostrado que estas sustancias son muy eficaces en la reducción de complicaciones derivadas de la enfermedad tromboembólica venosa en pacientes con factores de riesgo.Hasta ahora, el tratamiento actual de la trombosis, consistía en la administración de heparina por vía intravenosa o subcutánea seguido de Sintrom.Los nuevos anticoagulantes orales, Dabigatran, Rivaroxaban y Apixaban, han irrumpido con fuerza en el tratamiento y la prevención de la trombosis y están sustituyendo a los fármacos tradicionales.Los nuevos anticoagulantes orales tienen varias ventajas para el paciente:*Con información de la la Clínica Universidad de Navarra*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp aquí: https://whatsapp.com/channel/0029VaAf9Pu9hXF1EJ561i03 MV
