Este viernes 17 de febrero, como parte de las actividades de Guadalajara, Capital Mundial del Libro (GCML), la comunidad del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) sostuvo un diálogo cercano con el periodista, escritor y comunicador Diego Petersen Farah, una charla que versó acerca de la literatura y el periodismo.Así, Petersen Farah destacó la importancia de la narrativa de los sucesos al transformarlos en noticia; dijo que “las historias que merecen ser contadas, lo que merecen es ser bien contadas. Entonces, cuando tú logras contar bien una historia (…) lo importante es cómo lo narras y qué narras alrededor de ese caso. En la literatura lo importante no es como narras el suceso, qué historia merece ser contada, sino cómo le das a esa historia una importancia porque tiene que ver con el mundo social”.Las y los presentes escucharon las experiencias y memorias de Diego Petersen, quien hizo una retrospectiva de la labor del periodismo en la ciudad y cómo ha ido evolucionando con el paso del tiempo; “insisto, más que las historias, que es muy importante encontrar buenas (historias), hay que encontrar cómo contarla y qué es lo que cuentas. Hace que eso genere un conocimiento distinto al mundo al que lo trasladamos”, refirió.Asimismo, el comunicador afirmó que “la literatura es eso, otra manera de acercarse a la realidad, una manera mucho más compleja que el periodismo, pero al final, las dos son narrativas, lo que nos importa es narrar”.Asimismo, Petersen Farah habló de su más reciente publicación, ‘El Chacal’ (Planeta, 2022), novela en el cual aborda una historia de ficción que refleja las tentaciones de los periodistas en su relación con la política, con una trama desarrollada en la Ciudad de México y un protagonista que inicia su trayectoria periodística tras cubrir el fraude electoral de 1988.Por otra parte, el académico y cronista mexicano Guillermo Sheridan se presentó un día antes (el jueves 16) por la tarde en el ITESO, evento en el que le acompañó el periodista Iván González, donde el autor refirió que la poesía no solamente ha sido parte importante de su vida, sino que ha sido una forma de vida.Además, Sheridan habló de sus abuelas que le recitaban poesía, pese a que recitar es una palabra empalagosa que nunca salió de la boca del escritor, ya que para él la poesía no se recita, se dice, se lee. De esa forma, alejado de la promoción de la lectura, el compilador, antologador y biógrafo de poetas como Ramón López Velarde, Octavio Paz o Carlos Pellicer, dijo con desenfado que hacía falta acercarse a los textos, especialmente en una época en que el lenguaje pierde terreno frente a los elementos gráficos de la comunicación (como los emojis, por ejemplo).El investigador y profesor universitario dijo también haber leído “un estudio que demostraba que un joven mexicano utiliza un promedio de dos mil 400 palabras para comunicarse”, para luego expresar que “¡son poquísimas!”.De igual modo, Guillermo Sheridan también tomó uno de sus libros de crónicas, ‘Viaje al centro de mi tierra’, y de ahí leyó en voz alta el texto titulado “Diatriba contra ricachones”, en esta tarde de diálogo cercano con estudiantes y académicos.En estos términos, el autor se encontraba en la ciudad para participar en una clase magistral para las y los participantes de los Talleres de Creación Literaria dentro del programa de GCML, los cuales se organizaron con el objetivo de contribuir a la profesionalización del talento local.Finalmente, el Gobierno Municipal invita a la ciudadanía a participar de las diferentes actividades de GCML, las cuales se pueden consultar a través de redes sociales del Gobierno de Guadalajara, Cultura Guadalajara y el Gobierno estatal, o a través de la página web www.gdlee.mx.MF
