¿Qué es un coma etílico y cómo evitarlo en estas fiestas de Año Nuevo?

Durante estas fiestas decembrinas, las reuniones sociales parecen la excusa perfecta para ingerir más alcohol del debido. Las personas tienden a no medirse pues se trata de celebraciones que ocurren una vez cada año, sin embargo, es importarte no perder el juicio ni dejarse llevar. 

Pues un consumo excesivo de alcohol ocasiona desde cambios cognitivos como la búsqueda de más alcohol (llamado craving), disminución casi totalitaria de las capacidades racionales que nos permitan interactuar con el entorno, a en casos muy severos; intoxicación de alcohol y coma etílico. 

• Esta de más señalar que los accidentes automovilísticos (algunos fatales), aumentan de forma muy considerable durante esta época. 

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¿Qué es un coma etílico?

Acorde al portal de seguros de la empresa española, Mapfre, el coma etílico ocurre tras una ingesta masiva de alcohol etílico, siendo el estado más grave de una intoxicación etílica aguda. Para diagnosticarlo se deben cumplir ciertos síntomas como:

• Consumo reciente de grandes cantidades de alcohol, alteraciones psicológicas y conductuales como labilidad emocional. 
• Deterioro en la capacidad de juicio y en el desempeño social o laboral, junto con signos físicos como lenguaje incoherente, pérdida de coordinación, marcha inestable, falta de atención y pérdida de conocimiento. 

Este estado crítico se produce cuando la tasa de alcoholemia alcanza los 5 g/L, momento en el cual el cerebro pierde completamente el control sobre funciones vitales como la respiración y el ritmo cardíaco. En esta fase, la atención médica inmediata es indispensable, ya que la prolongación de esta condición disminuye significativamente las probabilidades de supervivencia sin daño cerebral.

Fases de la intoxicación etílica

Fase de euforia

• Se presenta con una alcoholemia de 0.5 g/L. La persona se muestra desinhibida, eufórica e impulsiva, pero si deja de beber en este punto, es improbable que desarrolle intoxicación severa.

Fase de intoxicación

• Con niveles mayores de alcohol en sangre, el cerebro comienza a perder coordinación, lo que aumenta el riesgo de caídas y lesiones.

Fase de confusión

• A 2 g/L, el cerebro es incapaz de mantenerse alerta. Aparecen somnolencia, dificultad para hablar y problemas de comprensión.

Fase anestésica

• Con una alcoholemia de 3 g/L, el control cerebral sobre el organismo disminuye drásticamente. La persona puede perder la conciencia y el control de los esfínteres.

Fase de shock o coma etílico

• Alcanzando los 5 g/L, el cerebro pierde completamente la capacidad de regular funciones vitales como la respiración y el latido cardíaco. Sin intervención médica urgente, el riesgo de muerte o daño cerebral severo es altísimo.

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A corto y medio plazo, quienes han sufrido un coma etílico pueden experimentar complicaciones en órganos vitales como el hígado, riñones y sistema digestivo, lo que resalta la importancia de prevenir y tratar estas intoxicaciones de manera oportuna.

Es fundamental disfrutar con responsabilidad durante estas épocas de celebración y convivencia, especialmente en lo que respecta al consumo de alcohol. Excederse no solo pone en riesgo nuestra salud física y mental, sino que también puede afectar nuestra seguridad y la de quienes nos rodean. 

Mantener un consumo moderado permite disfrutar de los momentos especiales sin comprometer el bienestar, evitando consecuencias graves como intoxicaciones, accidentes o daños a largo plazo en órganos vitales. 

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AO
 

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