De ese tamaño fue la promesa que lanzó el viernes pasado en el día 1 de su administración el gobernador electo Pablo Lemus Navarro, al referirse al principal problema de inseguridad que padece Jalisco y que le dejó como herencia su antecesor Enrique Alfaro.La expectativa de una nueva política, pero sobre todo de una nueva postura más empática que deje atrás la indiferencia que siempre reprocharon los colectivos de familiares de desaparecidos a la pasada administración estatal, se empezó a generar desde su fase de gobernador electo, cuando Lemus elevó a nivel de gabinete la instancia que se ocuparía de esta problemática, al anunciar la creación de la Secretaría de Inteligencia y Búsqueda de Personas (SIBP), la primera en su tipo en el País.No fue sólo la apertura de esta nueva Secretaría, sino la promesa de que los principales funcionarios serían acordados con las organizaciones de familiares de desaparecidos y madres buscadoras. Este compromiso no se cumplió del todo con la designación de Edna Montoya como la primera titular de la SIBP, y aunque en general los colectivos le concedieron el beneficio de la duda y le dieron un voto de confianza inicial, sus cuestionamientos deben tomarse muy en serio, porque son muestra de las expectativas creadas que pudieran revertirse negativamente para el gobierno lemusista si quedan sólo en promesas.Otro contraste en la forma de abordar el fenómeno trágico de las desapariciones respecto a su antecesor, fue el haberse apersonado el sábado pasado en la Nueva Central Camionera, polígono de impunidad de donde han desparecido al menos 29 hombres y mujeres, y que siempre fue minimizado por Alfaro.A la serie de reuniones que tuvo el equipo de Lemus con diversos colectivos de familiares de desaparecidos desde antes de tomar posesión, se sumó la de ayer que encabezó personalmente y en la que empeñó su palabra de tener reuniones periódicas con funcionarios de su gobierno, así como la instalación de cinco mesas de trabajo a partir de hoy martes, para ver temas presupuestales, de reglamento de la nueva Secretaría, de coordinación con las dependencias involucradas con el tema de las desapariciones, y para la propuestas de funcionamiento de la SIBP, y del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.Acompañando y avanzando en paralelo a estas actividades de planeación con los colectivos, se tendrán que realizar ya acciones como reforzar los protocolos de búsqueda y de acompañamiento a las madres buscadoras, para atender una de sus principales y añejas demandas.“No les vamos a fallar” a los jaliscienses en materia de seguridad, aseveró también Lemus cuando presentó a las y los integrantes de su gabinete de seguridad, que encabezará Roberto Alarcón, junto con quien instaló ayer también la mesa interinstitucional de seguridad, donde de entrada anunciaron operativos contra motociclistas fuera de norma, así como la instalación de arcos de identificación de placas en todos los ingresos carreteros. Por el bien de Jalisco, ojalá el gobierno de Lemus cumpla las expectativas generadas en este buen arranque en materia de desaparecidos y de seguridad en general, una de las principales preocupaciones de los jaliscienses. jbarrera4r@gmail.com
