Con base en los informes que han presentado nuestras amadas autoridades, que tanto se preocupan por nosotros, los delitos han bajado tanto que prácticamente ya no hay ilícitos. Así, el nieto de mi general García Barragán y otras autoridades han declarado que bajaron cientos de delitos; qué digo cientos, miles de delitos; qué digo miles, cientos de miles; qué digo cientos de miles, millones de delincuentes atrapados, que no sé si haya cárceles para tanto huésped. Por tanto, me parece una inutilidad haberle quitado la chamba al anterior procurador para poner a la nueva fiscala federal, salvo que esta sea muy cuatita de la señora Presidenta y que nuestra amada mandataria le haya dado la chamba pa’ que duerma calientita durante nueve años. Pero delitos, prácticamente ya no hay. Tal vez lo que deberíamos hacer es pedirle a Trump que nos mande algún puño de delincuentes para tener algo que hacer.Y como prueba digo que lo que tronó e hizo tronar un vehículo y lo que había a 300 metros a la redonda, en el estado de Michoacán, no fue terrorismo, porque nos choca esa palabra; ni fue crimen organizado, porque los bembos que llevaban el vehículo tronaron con la carga que llevaban. Entonces, digamos que eso fueron fuegos de artificio, aunque el resto del mundo se la pase pensando en cómo demonios un automotor cargado con ese explosivo pudo circular entre los miles de retenes del Ejército, Marina, Fuerzas Armadas y Guardia Nacional, que tienen pacificando dicho estado. Pero pasó y los malditos conservadores —que fueron por Maximiliano a Miramar— dicen que han de haber sobornado a tan probos funcionarios armados, porque si no, no habrían pasado.Nuestra amada mandataria, que el viernes quedó calificada como la más guapa, la más sexy, la más elegante, la más simpática y la más poderosa dirigente del mundo, no está contenta, a pesar de haber reunido a millones el pasado domingo, en el que el pueblo bueno cupo en el Zócalo de plástico, ampliable, para adorarla. Pero lució todo, para que tres días después el grosero de Trump diga que es linda, pero que le va a cobrar el agua; o sea, elogia la guapura y cobra los billetes. Y debe de estar enojada porque le dieron el Nobel de la Paz a una venezolana que le cae medio gorda. Y eso es razonable, porque el Nobel escogió a la tal Corina y la Presidenta hubiera preferido que eligieran a Trump como Premio Nobel de la Paz. Y yo echo mi cuarto de espadas, porque yo hubiera preferido que ganara el Dr. Simi; cada quien sus preferencias.Entonces ya se soltaron los bots de ambos lados, ya que el Gobierno tiene bots y apoyadores gratuitos, y la derecha tiene bots y apoyadores gratuitos; tablas, dijo el carpintero. Y empezó a circular el libro de AMLO y ya hasta a mí me llegó uno gratis, gracias al senador Adán Augusto.@enrigue_zuloaga